Si eres inquilino, es importante que conozcas tus derechos y que contactes con uno de nuestros abogados inmobiliarios para resolver cualquier consulta que necesites. El marco legal que regula los derechos del inquilino en España se basa en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), que establece los derechos y obligaciones de los inquilinos y los propietarios.
El marco legal que regula los derechos del inquilino
La LAU se aplica a todos los arrendamientos urbanos, tanto de viviendas como de locales comerciales. La ley establece los siguientes derechos básicos del inquilino:
- Derecho a la posesión pacífica: El inquilino tiene derecho a disfrutar de la vivienda sin que el propietario pueda desalojarlo arbitrariamente y sin una causa justificada, de las que recoge la LAU.
- Derecho a una vivienda habitable: La vivienda debe cumplir con los requisitos mínimos de habitabilidad establecidos por la ley.
- Derecho a la privacidad: El propietario no puede entrar en la vivienda sin el consentimiento del inquilino, salvo en casos excepcionales, en los cuales el propietario deberá explicar al inquilino del por qué de la necesidad de acceder a la vivienda.
- Derecho a la información: El propietario debe proporcionar al inquilino toda la información relevante sobre el arrendamiento, como la duración del contrato, la cantidad de la renta, etc. Toda esta información deberá estar recogida por escrito en el contrato de arrendamiento, en caso de tener alguna duda con alguna de sus cláusulas, o de pensar que pueden ser abusivas, no dudes en asesorarte con un abogado especializado.
- Derecho a la compensación por la mejora de la vivienda: Si el inquilino realiza mejoras en la vivienda, el propietario está obligado a compensarle por el valor de las mejoras. Aunque, cuidado, solo podrá realizar mejores o obras en el piso con el consentimiento expreso del arrendador, sino no tendrá derecho a exigirle ninguna cantidad, e incluso el arrendador se reservará el derecho a que el inquilino deje el inmueble en las condiciones que lo arrendó.
- Derecho a la indemnización por el desalojo: Si el propietario desaloja al inquilino sin un motivo o causa legal amparada en la LAU , el inquilino tiene derecho a una indemnización.
Otros derechos del inquilino
Además de los derechos básicos mencionados anteriormente, la LAU también establece otros derechos del inquilino, como:
- Derecho a la subrogación del contrato: El inquilino tiene derecho a subrogar el contrato a otra persona, siempre que el propietario lo autorice.
- Derecho a la reducción de la renta: El inquilino tiene derecho a solicitar una reducción de la renta si la vivienda no cumple con los requisitos mínimos de habitabilidad.
- Derecho a la resolución del contrato: El inquilino tiene derecho a resolver el contrato de arrendamiento si el propietario incumple sus obligaciones.
- Derecho a la reclamación de daños y perjuicios: El inquilino tiene derecho a reclamar al propietario los daños y perjuicios que haya sufrido como consecuencia del incumplimiento del contrato.
Cómo defender tus derechos como inquilino
Si crees que tus derechos como inquilino han sido vulnerados, puedes tomar las siguientes medidas:
- Intenta solucionar el problema directamente con el propietario.
- Si no puedes llegar a un acuerdo, busca asesoramiento profesional para que puedas acudir a los tribunales con un abogado inmobiliario, para que defiendan tus derechos.
¿Por qué contratar un abogado inmobiliario?
Contratar un abogado inmobiliario es crucial para garantizar transacciones seguras y proteger tus intereses. Este experto puede examinar contratos, resolver disputas, y asegurar el cumplimiento legal, brindando tranquilidad y evitando complicaciones futuras en transacciones inmobiliarias.
Consejos prácticos
Para defender tus derechos como inquilino, es importante que sigas los siguientes consejos:
- Lee atentamente el contrato de arrendamiento antes de firmarlo.
- Guarda todos los documentos relacionados con el arrendamiento, como el contrato, las facturas, etc.
- Haz fotos de todos los desperfectos que haya el mismo día de entrada al piso, y también el día de salida, para que así el propietario no pueda alegarlos posteriormente de manera injustificada para quedarse parte de la fianza.
- Si tienes algún problema con el propietario, hazlo constar por escrito.